Cada detalle nos sirve para aprender a cuidarnos. A veces nos olvidamos de nuestra propia vida, inmersos en un día a día loco desde el momento en el que nos suena el despertador hasta el momento en el que volvemos a encontrarnos con las sábanas. Olvidamos mirarnos al espejo y ver nuestra propia mirada.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario